viernes, 23 de febrero de 2018

CRÓNICAS MUTANTES: CUANDO LOS JEFES DE LA ERTZAINTZA COBRAN 90.000 EUROS Y VAN A HACERSE FOTOS A MADRID



Una policía que tiene un Director que cobra rondando los 90.000 euros y otros máximos responsables del Área de Seguridad, un Viceconsejero de Seguridad, que se ausentan en ocasiones como la de ayer, es un despilfarro para el contribuyente. Les ocurre como hace años a Gervasio Gabirondo, pésimo gestor y poco al pie del cañón, que se marchó a Madrid cuando aquel encuentro de Olympique de Marsella y el Athletic de Bilbao, declarado también de alto riesgo. En esta ocasión, el Director y el Viceconsejero, se encontraban de igual modo en Madrid, asistiendo al Salón Internacional de la Seguridad, que se celebra hasta este viernes en el recinto ferial IFEMA. En aquel tiempo y ayer, mientras estos vividores andan sacándose fotos en la Capi, hubo entones tres heridos, entre ellos dos policías y ayer, lo que ya conocemos desgraciadamente. A Estefanía Beltrán la están merecidamente criticando con toda la razón. Debía de dimitir. Por todo y porque, en primer lugar y ayer, en A3 MEGA TV, dijo que Inocencio murió en su casa. ¡Vamos1 sólo faltó decir que viendo "Cuéntame". Estos políticos, en cuanto asoma los radicales, se achantan.


Unos por otros, Inocencio que se encontraba recién salido de una grave enfermedad, murió. La verdad es que comprendo la desinformación del pueblo español que sigue noticias censuradas y tertulias amañadas en la mayor parte de los medios españoles. Seguir mucho a ciertas cadenas de radio y televisión, puede dañar muy seriamente el criterio y hacerte un hombre desinformado y agresivo contra alguien siempre. Esta misma tarde, un impresentable y manipuladora tertuliana en la TVE de las 24 horas mintiendo, me ha dejado estupefacto. Resulta que, según su retorcido criterio interesadamente manipulador, nadie esperaba semejante bronca en torno al partido de fútbol, incluso se esperaba mayor agresividad en la otra manifestación que hubo en el día de ayer en Bilbao, con los jubilados. Sabemos todos de sobra la enorme preocupación que había en la ciudad de Bilbao y en las autoridades vascas, preparando dispositivos, en el propio sector comercial que cerró establecimientos ante la previsión de graves incidentes, y llega esta señora y parece ser que nadie estaba preocupado por lo que, además, nadie sustentaba pudiera suceder. ¡Es alucinante! Y habrá gente del estado que escuche ello y se lo crea. Es un argumento no de una idiota, todo estaba considerado desde los parámetros de “alto riesgo”, sino pensadamente retorcido para justificar todos los enormes fallos y silencios que ha habido en esta desgraciada tarde bilbaína.


Euskadi es un territorio de confrontación donde la izquierda abertzale no pierde oportunidad para que, la misma, asome y cree conflictos. Hay mucho veneno en Euskadi; territorio que es como aquellas bombas de la guerra que quedaron en los campos de los pueblos de la contienda y explotaron en numerosas ocasiones. Ayer, los graves incidentes, comenzaron con los ultras del Athletic, por provocación a los del Spartak ya se lió. De ahí se desencadenó una batalla campal donde ha habido mucha mentira y equivocada información para tapar la responsabilidad de, no solo esos ultras, sino de la policía vasca. Desgraciadamente, un ertzaina, ha fallecido porque no tenía edad ni preparación para estar ahí, agotado y que cubría un servicio insuficiente. Hay mucho de lo que hablar.


Aparentemente todo acusa a los “salvajes rusos”. Hay que ser justos, conocer a Euskadi, y no hay que lanzar carnaza contra nadie porque en Euskadi manden, en muchos lugares, unos exacerbados borrokas que siguen condicionando la vida de la población. Los rusos llevaban varios días en Bilbao y no se registraron incidentes. Ya la ultraizquierda vasca proetarra se manifestaba en Bilbao, el miércoles noche, para acusar a los hinchas moscovitas de “homófobos”, ·racistas”, “broncas”, “sexistas”. Todo, sin alguna intervención de la policía vasca. Se colocaba la cerilla en la gasolina y nadie ha pedido explicaciones de ello y, es más, en la mayoría de los medios vascos, les han tapado porque se llevan muy bien con estos ultras del fútbol.


¿Quién pagó esto? Por encima de todo un ertzaina que no debía de estar allí; la gente que quedó malherida, uno del Spartak apuñalado en la espalda, en concreto; el comercio; la vida tranquila de la ciudad y la imagen del fútbol y de Bilbao. ¿Quiénes ganaron? Los ultras y los que iniciaron todo. No voy a defender a los rusos pero se les recibió con insultos, provocaciones, tensando la situación porque, para la radicalidad y sus secuaces, ello es la mejor estrategia para corromper, desmembrar, desmoralizar y dinamitar a una sociedad. Y el gobierno vasco permitió se incendiara el ambiente porque  los radicales, en Euskadi, viven muy tranquilos por aquello de “La Paz” que nunca ha llegado. Y aunque hoy la Consejera denunciara los incautados en los borrokas vascos, puños americanos, barras de acero, porras extensibles, palos, botes de gas, navajas, martillos, piedras y bengalas en el dispositivo de seguridad desplegado, lo cierto es que prendieron la mecha desde un día antes y que el Gobierno vasco tolera mucho a ciertas personas violentas que usan de la calle o utilizan el fútbol para expresar su agresividad; ahora reclamar medidas no me vale. 

  
Lo que más me preocupa es la presencia de Inocencio en el operativo. Cierto es que hemos conocido que llevaba 13 horas sin descansar; que no es verdad que falleció en el lugar, posiblemente al salir de la furgoneta,  sino en un momento de relativa calma, cuando el agente permanecía en una fila con sus compañeros vigilando y actuando contra  el grupo de hinchas locales que lanzaban bengalas y todo tipo de objetos: En ese instante se desplomó al suelo sin que le alcanzara objeto alguno, pero llevaba muchas horas sin reposo y había superado una enfermedad grave. Este agente de 51 años no debía pertenecer a los beltzas, ya que carecía de preparación; no tenía que haberse encontrado allí; que se hallaba porque han mentido los oligarcas del PNV. El dispositivo era insuficiente; sólo 220 policías preparados para el control de gente y mantener con profesionalidad el orden público. Inocencio carecía de preparación física y técnicas de control de masas. 


El Gobierno vasco ha manipulado las cifras y en el dispositivo de la Ertzaintza, no había 500 agentes, y es “rotundamente falso” el dato aportado por la Consejería de Interior. Había algo más de 200, en concreto 216 efectivos de la Unidad de Brigada Móvil, que son los ertzainas antidisturbios. Y luego 150 agentes de Protección Ciudadana. Sólo ha habido nueve detenidos, que no deja de ser chocante, como el hecho de que el Gobierno vasco estuviera vendiendo durante días cuando los que estuvieron acosando y realizando continuas cargas y lanzamiento de objetos y bengalas fueron los Herri Norte. La gran pregunta es ¿Por qué se evaluó el riesgo tan precariamente? No lo tiene fácil la policía vasca. Lo único así a destacar es el sueldazo que cobra. Pero carecen de jefes, de preparación, de apoyo de fiscales y de la justicia, de sostén de sus mandos, de operativos adecuados para ocasiones y que no tiene efectivos adecuados para de modo eficaz, causando el menor daño posible, poder cortar una situación. O se le va la mano, como con Cabacas, o mueren ellos. Es una policía muy en tensión. 


Mal vista por sectores; unos porque cobran lo inimaginable, una de las policías mejor pagadas del mundo; otros, porque creen que no actúan contra ETA por mandato y como debieran y muchos de igual modo, borrokas y politicuchos millonarios de ultra izquierda, que salen diciendo que disfrutan cuando ven patear a un policía vasco. Si un preso de ETA muere de infarto en una cárcel, es motivo de gran bronca general y de petición de petición sumarísima de explicaciones y responsabilidad a la “injusta” condena alejada; si muere Inocencio en el operativo, es la vida. Y así nos va. ¡En su Memoria!

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